La llegada de un nuevo bebé a la familia es un momento emocionante, pero también puede generar dudas o ansiedad en los hermanos mayores. Para ellos, el cambio puede ser abrumador, especialmente si están acostumbrados a recibir toda la atención.
Sin embargo, con un enfoque adecuado, los hermanos mayores pueden no solo aceptar la llegada del bebé, sino también sentirse parte fundamental del proceso. A continuación, te damos algunos consejos sobre cómo involucrar a los hermanos mayores en esta nueva etapa familiar.
1. Habla sobre el nuevo bebé de forma positiva y desde el principio
Es importante que los hermanos mayores se sientan incluidos desde el comienzo. Cuéntales que van a tener un nuevo hermanito o hermanita de manera positiva, haciéndoles ver que este bebé es una adición emocionante para la familia. Explícales lo que significa tener un hermano, cómo pueden compartir momentos y cómo su rol como hermano mayor será muy especial.
Puedes leer libros o ver videos sobre la llegada de un nuevo bebé, para que empiecen a familiarizarse con la idea. Aprovecha estas oportunidades para responder a sus preguntas y escuchar sus sentimientos. Haz que se sientan valorados en todo momento.
2. Involúcralos en la preparación para la llegada del bebé
Haz que los hermanos mayores participen en la preparación para la llegada del bebé. Permíteles tomar decisiones sobre pequeños detalles, como elegir ropita, decoraciones para la habitación o incluso ayudar a organizar las cosas del bebé. Esta implicación les ayudará a sentir que tienen un papel activo en la preparación, lo que reducirá cualquier posible sentimiento de desplazamiento o celos.
También es útil crear un ambiente de anticipación y emoción. Si el hermano mayor está entusiasmado con la llegada del bebé, será más probable que vea al nuevo miembro como un compañero de aventuras y no como una «competencia» por la atención.
3. Crear momentos especiales para ellos
Con la llegada del bebé, es natural que gran parte de la atención de los padres se centre en el recién nacido, pero es fundamental dedicar tiempo exclusivo para los hermanos mayores. Estos «momentos especiales» pueden ser tan simples como leerles un cuento, hacer una actividad que les guste o simplemente tener un rato de juego solo con ellos.
El tiempo de calidad es clave para que los hermanos mayores no se sientan desplazados. Estos momentos también les aseguran que, a pesar de los cambios, siguen siendo importantes para los padres.
4. Explícales a los hermanos mayores qué esperar del bebé
Muchas veces, los hermanos mayores pueden tener expectativas irreales sobre cómo será el bebé. Es importante explicarles que al principio, el bebé necesitará mucho cuidado y atención, que llorará, dormirá mucho y no podrá jugar de inmediato. Esto puede ayudar a reducir la frustración si se dan cuenta de que su nuevo hermanito o hermanita no está listo para interactuar como ellos esperaban.
Aprovecha esta explicación para enseñarles que, aunque al principio el bebé requerirá mucho tiempo, llegará un momento en el que podrán jugar juntos, y que mientras tanto, pueden ayudarte a cuidarlo.
5. Involúcralos en las tareas cotidianas
Permitir que los hermanos mayores te ayuden con las pequeñas tareas relacionadas con el bebé puede fortalecer su sentido de responsabilidad y apego. Actividades simples como alcanzar pañales, cantarle al bebé o simplemente observarlo mientras lo cambias, les hará sentir útiles y parte del cuidado del bebé.
Eso sí, asegúrate de que estas tareas sean divertidas y no impuestas. La clave es que se sientan orgullosos de su rol como hermano mayor, y no sobrecargados.
6. Valora su rol como hermano mayor
Reforzar positivamente el rol del hermano mayor es fundamental para construir una relación saludable entre los niños. Diles lo orgulloso que estás de ellos por ayudar, por mostrar cariño o por ser pacientes. Hazles ver que su papel en la vida del bebé es insustituible.
Los halagos y la afirmación constante les hacen sentir que su presencia es crucial para el bienestar de la familia y que el bebé también necesita su amor y cuidado.
7. Permitirles expresar sus sentimientos
A pesar de todas las medidas que tomes, es posible que los hermanos mayores tengan sentimientos encontrados con la llegada del bebé. Puede haber momentos de celos, confusión o incluso tristeza. Es fundamental permitir que expresen estos sentimientos sin juzgarlos. Escucharles y validar sus emociones les hará sentirse comprendidos y amados.
Habla con ellos, pregúntales cómo se sienten y asegúrales que es normal sentirse así. Al hacerlo, estarás ayudando a gestionar sus emociones y a construir una relación más fuerte con el nuevo bebé.
Puedes ayudarte con juegos psicoeducativos para que tu hijo aprenda a expresar sus sentimientos y a gestionar el estrés que pueda generarle la nueva situación familiar.
Conclusión
La llegada de un nuevo bebé es un momento único para toda la familia, y con una preparación adecuada, los hermanos mayores pueden adaptarse a este cambio de manera positiva. Involucrarlos en el proceso, dedicarles tiempo especial y permitir que expresen sus emociones son claves para que el hermano mayor no solo acepte la llegada del bebé, sino que disfrute de su nuevo rol en la familia. Con paciencia y amor, esta nueva dinámica fortalecerá los lazos entre hermanos, creando una relación llena de complicidad y cariño.